“Deepfake” y Ciberseguridad: Una amenaza para la cual las empresas no están preparadas
Actualidad -- octubre 03, 2019
Los desafíos en la lucha contra las identidades falsas
¿Estás listo para identificar cómo los deepfakes podrían ser utilizados para afectar la seguridad de tu empresa? Es esencial saber cómo esta tecnología puede ser mal utilizada para afectar tu negocio. Los deepfakes son contenidos audiovisuales que combinan el deep learning o inteligencia artificial (IA) para crear audio y video que reproducen de manera extremadamente realista la voz, características y expresiones faciales de una determinada persona. Sin embargo, entre las muchas tecnologías relacionadas con IA, los deepfakes son una de las cuales las sociedades y empresas, aún no están preparadas.
Este año los deepfakes han vuelto a ser protagonistas, pero esta vez no fueron las celebridades ni figuras políticas las que estuvieron en la mira de los contenidos falsos, como de costumbre.
El proveedor de seguridad Symantec reveló a la BBC que audios falsos fueron utilizados para robar millones de dólares de tres compañías que aún no han sido reveladas. Como informan en Axios, “los criminales están comenzando a utilizar deepfakes - a partir de audio generado a través de la IA- para hacerse pasar por los CEOs y robar millones a empresas que están muy poco preparadas para luchar contra ellos.”
La realidad es que hay una gran cantidad de fuentes de audio y video disponibles como entrevistas, discursos de conferencias y apariciones en paneles que se pueden usar para alimentar a un sistema de IA capaz de "aprender" cómo imitar no solo una voz, sino la personalidad de un ejecutivo.
Es una amenaza que apenas comienza a surgir, pero las falsificaciones de audio y video están mejorando a un ritmo aterrador. Son cada vez más fáciles de hacer, especialmente los audios que requieren menos habilidades, tiempo y gastos por parte de sus creadores. Además, el realismo de los deepfakes es tal que puede ser imposible a simple vista saber si se trata de una falsificación.
Las posibilidades de la inteligencia artificial son incuestionables y es posible predecir que se seguirán desarrollando oportunidades tecnológicas a medida que distintos sectores apliquen esta técnica a sus negocios. En lo que se refiere a los deepfakes, a medida que las falsificaciones se vuelven más sofisticadas y difíciles de detectar, las empresas pueden verse obligadas a revisar protocolos para garantizar procesos contra el fraude digital.
Finalmente, la mejor defensa que tenemos hoy contra las falsificaciones es la conciencia y el instinto humano. Es parte de nosotros, un instinto de supervivencia y de reconocimiento de las situaciones que se ha ido construyendo durante miles de años y es la mejor ventaja que tenemos sobre las máquinas. Lo mínimo que hay que hacer es usarla a nuestro favor.